Entre todas las mejoras que tienen las nuevas series de televisores, se encuentra el procesador. Se trata de un elemento técnico muy importante, en el que los consumidores quizás ya tenemos mucha experiencia respecto a lo que nos ofrece en otros dispositivos electrónicos como ordenadores, portátiles, tablets o smartphones, pero no identificamos exactamente la influencia del procesador a la hora de mejorar nuestra experiencia de usuario delante del televisor.
Este elemento de hardware trabaja de forma diferente en función de lo que hacemos con nuestro receptor. No es lo mismo que estemos viendo una película en UHD, que una serie de televisión en la programación del día a día, que utilizando la Smart TV para acceder a Internet o jugando con algún título de moda que nos hemos descargado. Para todas ellas, un procesador más potente, más capaz, va a mejorar la experiencia de uso cuando estamos delante de la pantalla.
Gama de procesadores de los televisores Philips
Los procesadores de dos núcleos se encuentran presentes en la mayoría de los modelos de las series 4000 y 5000 y en todos los de la serie 6000. Es un tipo de micro que aprovecha toda la capacidad que nos permite un sistema operativo como Android en el televisor y que ejecuta sus aplicaciones con fluidez y rapidez.
Por su parte, procesadores de cuatro núcleos o Quad Core son los que están ya presentes en la serie 7000. Este procesador Quad Core de Philips permite ejecutar Android y ofrecer una emocionante experiencia de juego. Con Android en el televisor, además podemos navegar, ejecutar aplicaciones y reproducir vídeos de forma súper rápida, intuitiva y divertida. Por supuesto, todo lo que tiene que ver con el escalado de imágenes y su procesamiento en los televisores se realiza de forma más fluida y solvente.
La serie 8000 ya incorpora procesadores de seis núcleos, Hexa-Core, en la mayoría de sus modelos, con la potencia más que necesaria a la hora de utilizar Android en el televisor y que ayudan, sobre todo, a mejorar el procesado de las imágenes en los televisores con resolución 4K.
Eso sí, no importa sólo el número de núcleos, sino también la frecuencia del procesador, medido en megahercios (MHz). En general, se puede decir que a mayor frecuencia de funcionamiento más potencia para el tratamiento de las imágenes, aunque el comportamiento real se puede complicar mucho más. No sólo debe tener potencia, sino también saber sacarle partido a la misma, tal y como hacen los televisores Philips.
Para todo esto se utiliza el procesador en un televisor
El procesado de imágenes con las tecnologías propias de un televisor de resolución 4K requiere de una mayor potencia de cálculo para efectuarlas a la velocidad precisa. Ultra Pixel HD, el software de generación de nuevos fotogramas Natural Motion o el motor de escalado Ultra Resolution son algunas de las innovaciones que se benefician de la capacidad de cálculo de estos procesadores y que ayudan a su ejecución.
Pero esta potencia de procesamiento también la podemos aprovechar y sacar partido en otros aspectos más básicos, pero que utilizamos constantemente. Así, la puesta en marcha del televisor será mucho más rápida si cuenta con un procesador más potente. Lo mismo ocurre cuando tenemos que cambiar de canal, utilizar la guía electrónica de programación o abrir aplicaciones en la Smart Tv, tal y como hemos comentado antes. Android puede sacar partido a la capacidad de estos micros.
Por último, tenemos que tener en cuenta que un buen procesador en el televisor nos facilita otras muchas funciones que realizamos y que no tienen que ver estrictamente con ver la tele. Algo similar a lo que ocurre cuando tenemos que realizar alguna mejora en nuestro televisor a través de una actualización del firmware, que será más rápida gracias a este hardware. De esta forma, siempre tendremos nuestro receptor actualizado para poder utilizar todas las capacidades y características que tenga disponible.
En Vive Philips | 4K o UHD, ¿qué resolución es más adecuada para ver los contenidos en el televisor?